Oración a la Santa Cruz de Caravaca

Cruz de Caravaca

ABOGADA CONTRA LOS RAYOS, CENTELLAS Y TEMPESTADES.

De esta cruz soberana oigan, señor, milagros y prodigios, con mil primores, pues son tan grandes, que no hay pluma que pueda bien numerarlas.

De los cielos bajaron con alegría los ángeles en coro, a conducirla; y pues son tantos, los milagros que obra, que es un encanto.

Hombres, niños y mujeres lleven consigo la Cruz que fue bajada del Cielo Empíreo para consuelo, líbranos de las garras del Dragón fiero.

Cojos, mancos, tullidos, ciegos y sordos, en la Santa Cruz hallan consuelo todos: que es tan hermosa, que la escogió Cristo para su esposa.

Del cielo fue enviada del Padre Eterno, para que conozcamos el gran misterio que es el que encierra que así nos la conceda Dios en la tierra.

Los serafines todos cantan y alegran fino diadema: a esta Cruz soberana porque en el cielo es el hecho de Cristo, nuestro consuelo.

Dichosa Caravaca puedes llamarte, pues gozas en los cielos el Estandarte, que es la santa Cruz donde su vida y sangre dio nuestro Jesús.

Todos los caminantes y marineros, por la mar y caminos andan sin miedo, como se valgan de llevar en el pecho la Cruz armada de esta reliquia.

Son grandes los misterios y así digamos todos que sea bendita; para que tiemble el infierno y la gente que dentro tiene.

De muertes repentinas, incendios, robos, y otros muchos peligros nos libre a todos la Cruz Sagrada que en los brazos de Cristo fue desposada.


¿Qué es la Cruz de Caravaca:

Es un crucifijo con dos brazos. En el centro tenemos la figura de Jesús o su monograma JHS y en los laterales se encuentran dos ángeles arrodillados en postura de oración.

Caravaca es una antigua ciudad del interior de España. Cuenta la leyenda que el Príncipe Moro Ibn-Hud conocido como Muhammad ben Yaquib (los moros dominaban la región en la época) deseaba conocer la fe cristiana. Cuando supo que uno de sus prisioneros era el párroco Gines Pérez Chirinos, le ordenó que celebrara una misa. Sus siervos limpiaron una sala del castillo de Alcázar y montaron un altar de acuerdo con la lista y especificaciones del sacerdote preso. En el día elegido para la celebración estaban presentes no sólo el príncipe musulmán, sino toda su familia, sus siervos y algunos soldados. Luego del inicio Pérez Chirinos sintió la falta de la cruz, que por su olvido no fue colocada en la lista. Aprehensivo, tuvo que explicar a todos que no podía continuar el rito. Ibn-Hud se quedó muy decepcionado y frustrado. Ante esta situación un milagro sucedió: surgieron por la ventana dos ángeles que trajeron una cruz hasta el altar. El Príncipe Ibn-Hud, su familia y todos los musulmanes que se encontraban en el lugar se convirtieron al cristianismo. El párroco y los prisioneros fueron liberados. La Santa Cruz apareció en el Castillo Alcázar de Caravaca el 3 de mayo de 1232, desde entonces las sucesiones de innumerables milagros hicieron la devoción a la Cruz de Caravaca conquistar fieles en todo el mundo.

A pesar de ser un objeto de devoción originalmente católico, este poderoso amuleto pasó a ser adoptado también por los cruzados, templarios, misioneros, esotéricos y brujos como símbolo de protección.

La cruz de Caravaca llegó a Brasil traída por los primeros colonizadores, en la flota de Martín Alfonso de Souza.

El significado esotérico de la cruz es el siguiente: la cruz del espíritu (la línea vertical) y el plano material (línea horizontal), dando como resultado al hombre, que es un ser que se mueve en el plano material con opción para ascender o descender espiritualmente. Esto implica que, en muchas ocasiones, necesita protección y una de las mejores formas es llevando la cruz, que le recordará su posición en la escala evolutiva y de esta manera hace que se centre en el cruce del espíritu con la materia.

El ritual de preparación de la Cruz para conferirle todo su poder se hace de la siguiente manera: Durante tres días, tres veces al día, se unge la cruz con algún tipo de aceite propio para rituales. En los cuatro días siguientes se hará lo siguiente: Con la Cruz acostada, se coloca todos los días una vela roja junto a cada uno de los extremos verticales de la cruz; una vela azul en los extremos horizontales del palo más pequeño y una vela amarilla en los extremos del palo horizontal más grande. Las velas deben encenderse diariamente y quemarse un incienso «Cruz de Caravaca», (si no tiene use el de su preferencia) y luego recite la oración. Además, en el séptimo día se dirá en voz alta: «En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, yo consagro mi cruz para que me traiga felicidad, amor, abundancia y me proteja de todo mal».

Después de estar debidamente preparada por la persona que la va a usar y de haber efectuado los rituales correspondientes, se puede comenzar a usar la cruz.

Milagrosa oración de la Cruz de Caravaca

(De pie —genuflexión— haga la señal de la cruz)

Te adoramos Señor Jesucristo y te bendecimos porque con tu Santa Cruz has salvado al mundo.

(Genuflexión — haz la señal de la cruz)

Yo he pecado, y por eso suplico tu misericordia, tú que perdonaste el pecado del mundo, perdona mis pecados.

(Genuflexión— haga la señal de la cruz) *

Restituye Señor la alegría de tu amparo y dame fuerzas para caminar en la práctica del bien. No desprecies, Señor mi Dios, mis oraciones.

(Genuflexión— haga la señal de la cruz) *

Te adoramos Señor Jesucristo y te bendecimos porque con tu Santa Cruz has salvado al mundo. *

Tú que eres alabado por los cielos. A ti todos los serafines, querubines, arcángeles, ángeles proclaman: «Santo, Santo, Santo, Señor de los ejércitos» por todos los siglos de los siglos, así sea. *

Mi Señor Jesús. Tú que derramaste Tu Santísima Sangre en la Cruz y nos has abierto el camino del cielo, te rogamos por Tu bendición, ten piedad de nosotros, Señor. Suplicamos tu clemencia y que nunca desampares a los que imploran tu Gracia y tu protección en sus tribulaciones. *

¡Salve Cruz Gloriosa, Santo Madero, Milagroso Leño! (haga la señal de la cruz) *
Ante tu Cruz os imploramos Señor Jesús, mi Dios, mi Redentor, que tu misericordia nos conceda la gracia:

(Mencione aquí su pedido) *

Por tus cinco llagas, por tu corona de espinas, por los clavos que hirieron tus pies y manos, atiéndenos Señor, y lava nuestros pecados. *

Bendita Cruz en la que fue clavado Nuestro Señor Jesucristo, extiende sobre nosotros tus brazos protectores. Defiéndenos, Sagrado Leño, de las tentaciones demoníacas. Santa Cruz, venimos a Ti como a nuestro verdadero refugio y fortaleza. Nuestro escudo y arma, nuestra luz y salvación de los peligros, enfermedades, crímenes y pecados.

(Genuflexión— haga la señal de la cruz) *

Mi Señor Jesucristo, sé mi Maestro y mi amigo, concédeme con el perdón de mis pecados la gracia de:

(Repita aquí su pedido*) *

Alivia nuestro corazón afligido, conforta nuestro ánimo. Ilumina nuestro espíritu y danos el coraje para evitar el pecado: (arrodillarse) *

He aquí el leño de la cruz del que pendió la salvación del mundo.

Ágios ó Théos, Ágios íchirós, Âgio Athánatos, Eléiseon Imás.” *

Alabado sea el Señor
Para siempre sea alabado.
Así sea, amén. *

(Rezar un padrenuestro y un credo)

(FIN DE LA NOVENA)

Utilizar en momentos de gran peligro

(La siguiente invocación debe realizarse en casos de gran peligro, preferentemente rezar de rodillas.)

(Hacer la señal de la cruz) «Por la Santísima Cruz en la que tú, Nuestro Señor Jesucristo, padeciste y moriste, sálvanos. Extiende sobre mí tu gracia. Dame a cosechar los frutos de la cruz, símbolo de tu Sacrificio. A ti suplico protección, por la Santa Cruz de Caravaca, y a tus pies me refugio. Socórreme, por mi fe. Así sea, Amén.

La gente de fe dice que la Cruz de Caravaca es extremadamente eficiente para curar toda clase de enfermedades, como también innumerables prácticas para la liberación de hechizos y encantamientos con bendiciones y exorcismos. De acuerdo con la cultura popular e influencias diversas, la Cruz de Caravaca puede adquirir otros nombres: Cruz de las Misiones, Cruz de Lorena, Cruz de Borgoña, Cruz de San Miguel, Cruz Misionera. El verdadero significado de la Cruz de Caravaca sigue siendo el de protección y se utiliza en forma de reliquia pectoral o pedestal. Los dos brazos de la Cruz de Caravaca representan la distinción arzobispal o patriarcal. Popularmente los dos brazos significan la fe redoblada.

Oración a la Cruz de Caravaca

Día en que debe hacerse: Domingo.
Hora aconsejada: Mediodía.
Ubicación: Junto a la ventana de la habitación.

Para la protección contra un peligro inminente de guerra, tempestad o robo, la oración debe ser escrita en un papel blanco que se coloca dentro de un vaso conteniendo agua bendita, al lado de la cruz de Caravaca.

Para aumentar la riqueza y la suerte, se aconseja el siguiente ritual: dentro de un vaso de cristal transparente se echan siete monedas, dejándolas caer una a una. Al frente del vaso se enciende una vela dorada y se coloca una cruz de Caravaca, dorada o plateada.

La cruz de Caravaca constituye una fuerte protección contra desastres naturales, desgracias humanas, terremotos, huracanes, epidemias y otros males que asolan el planeta. Se dice que los efectos devastadores del nuevo milenio no afectan a aquellos que piden la ayuda de este amuleto a través de su oración. Al mismo tiempo que se recitan las palabras, debe sostenerse la cruz con la mano derecha, apuntándola hacia el cielo. Se hacen las peticiones, y debajo de la cruz se ponen todos los documentos referentes a los negocios o procesos que se quieran ver desbloqueados.

Esta cruz es una mezcla de magia y alquimia que encierra los símbolos y secretos cósmicos. Traída al mundo por mensajeros celestiales, portadora de protección angélica, ayuda a la transmutación del espíritu. El Papa León, inspirado por entidades celestiales, dejó escrita una oración que está destinada a ser leída todos los domingos al mediodía por los devotos de la cruz y que hace que la persona se proteja de peligros y enfermedades.

Oremos:

«Crux Mihi certa salus
Crux est quam semper adoro
Crux Domini mecum.
Crux Mihi refugium»

Esto traducido del latín significa:

La cruz es mi segura salvación.
La cruz es lo que siempre adoro.
La cruz me acompaña.
La cruz es mi refugio.

Después de consagrar la cruz, hacer esta oración todos los domingos.

Fuente: A CRUZ DE CARAVACA

Compra tu cruz de Caravaca en Amazon.