Oración a San Deshacedor

Oh, poderoso San Deshacedor, justiciero de la maldad y la codicia, hoy vengo humillado a tus pies para para pedirte permiso para que según viro esta vela, se le deshaga a mis enemigos y mis contrarios, hombre o mujer, todo lo malo que estén haciendo contra mí o mi cara, y a todo lo que me pertenezca a mí.

San Deshacedor glorioso, héroe del mal y la injusticia, quiero que como he venido yo, humillado a ti, así quiero ver a todos mis enemigos y contrarios: en nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Con estas tres palabras benditas llamaré a mis enemigos para que vengan humillados a mis plantas como fue humillado Satanás a los pies de San Miguel.

Ojos tengan y no me vean, corazón tengan y sean prisioneros, sentidos y no me sientan, oídos y no me oigan, manos tengan y no me cojan, pies tengan y no me alcancen, cuchillos tengan y no me corten, arma de fuego y no disparen, y se les llene de agua la boca y no me hablen.

San Deshacedor, deshace de mi casa todo mal que en ella se encuentre convirtiéndolo en nada; que todo el que pretenda disponer de algo de mi persona se le deshaga esa idea y quede arrepentido.

San Deshacedor, santo de gran poderío, deshácele esa idea a quien quiera mi enemigo ser. Amén.

Se rezan 3 credos, 2 Padres Nuestros y un Ave María.

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Oración para alejar los obstáculos de nuestro camino

Santa María Madre de Dios, Virgen llena de gracia, eres nuestra desatadora de nudos. Con tus manos llenas del amor de Dios desatas los obstáculos de nuestro camino como un nudo que bajo tus manos pierde todas las trabas ¡y se convierte en una cinta recta del amor de Dios! Desata, Virgen y Madre, Santa y Admirable, todos los nudos que nosotros mismos nos causamos, por nuestra propia voluntad, y todos aquellos que delante de nosotros impiden nuestro camino. Ilumina con tus ojos sobre ellos, para que todos los nudos se vuelvan transparentes y nosotros, llenos de gratitud, podamos con tus manos desatar lo que parece imposible.

¡Amén!

Nuestra Señora Desatadora de Nudos, ¡Ruega por nosotros que recurrimos a ti!¹

Ritual para romper obstáculos y derribar muros

Herramienta:

• Una vela dorada
• Una pluma y papel

Ritual

Enciende la vela.

Medita en todo lo que te bloquea y mientras lo piensas, dibuja un rectángulo que simbolizará el muro. Dentro de este muro, escribirás tus miedos, tus sentimientos negativos, tu barrera que te impide avanzar… Haz un muro para cada bloqueo que tengas.

Luego recorta dejando un margen en cada muro. Pon algo de música que te guste o toca el tambor, o usa un tazón tibetano para generar vibraciones poderosas y energías positivas. Cuando te sientas listo, toma el primer muro y rompe la hoja visualizando el obstáculo rompiéndose como un cristal.

Deja que tus emociones surjan dentro de ti: si quieres reírte, ríete, si quieres gritar, grita, si quieres cantar, canta en voz alta y déjate llevar por tus emociones sin restricciones. Y una vez que hayas destruido todos los obstáculos di: «¡Soy libre, los obstáculos han sido destruidos!».²